El pasado martes, 6 de julio, la comunidad KSI se reunió virtualmente para participar en la quinta y última clase del minicurso Introducción a la Tora, una mirada contemporánea.
En esta ocasión se conversó sobre la geografía de los lugares que se mencionan y que son ciudades referenciales importantes tanto para el reino del norte -el reino de Israel-, como para el reino del sur -el reino de Judá.
Después, para responder todas las interrogantes que habían surgido a lo largo del curso en cuanto a contradicciones, cambios en el nombre de Dios, entre otros, se presentó la teoría principal en el estudio de la crítica bíblica: la hipótesis de los documentos, que plantea que hay cuatro fuentes independientes que fueron editadas en conjunto para darle formato al texto que nosotros tenemos.
Posteriormente quedó la pregunta de que, asumiendo esa hipótesis, que es reconocida por todo el mundo académico, dónde radica la santidad de la Torá como nuestro libro sagrado. Sobre eso afirmamos que su santidad está en la importancia que el pueblo judío le ha dado en los últimos 1,500 años y que, mientras siga siendo fuente de inspiración, seguirá siendo un texto sagrado.
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