Ki Tavó 5775

Los Rabinos de la UJCL escriben sobre la parashá de la semana Rabino

Rabino Darío Feiguin

Congregación B´nei Israel, Costa Rica

Humildad, Gratitud y Alegría

La Parashá de esta semana, Parashat Ki Tavó, se divide en dos partes. La primera habla de la Mitzvá Bikurim: recolectar las primicias de la Tierra, los primeros frutos y las primeras cosechas, y llevarlos a Ierushaláim. 

La segunda parte de esta sección de la Torá, es un enorme listado de bendiciones y maldiciones. La mitad del pueblo estaba en un monte (Guerizim); la otra mitad en el otro (Eival), y en el vacío del valle se jugaba la vida misma: la elección de hacer de la Vida una bendición o una maldición. 

En el Talmud, en el Tratado de Meguilá, hoja 31, Pág. B, dice que Ezra el escriba decretó que esta Parashá se lea en el mes de Elul, el mes anterior a Rosh Hashaná, el mes en el que estamos llamados a hacer nuestro balance del alma, para estar preparados para confrontarnos con nuestras propias existencias frente a D´s en el Día del Juicio, que ya está próximo. 

Pareciera ser que leemos esto en esta época porque la bendición y la maldición no vienen sólo de D´s. De él vienen la Vida y la salud, la enfermedad y la muerte. Pero muchas de nuestras Vidas se llenan de maldiciones, no por una sentencia divina del más allá, sino por falta de sensibilidad nuestra, más acá. La Justicia, el hambre, la desocupacion, la desigualdad, la hipocresía y la corrupción, son maldiciones que están bien cerca, producto de una sociedad que elige, aunque sea por omisión, ir a buscar la Vida en el monte equivocado. 

¿Cada uno de nosotros pone su parte para el bien común, llevando la simbólica canastita?

¿Qué es lo que ponemos en nuestra canastita? ¿Lo mejor que tenemos? ¿Lo que nos sobra?

¿Lo que llevamos, lo llevamos con gratitud o porque no nos queda otra alternativa? ¿Lo hacemos con ganas o por obligación?

¿Acercamos nuestras primicias modernas con alegría, o con resignación?

Me da la sensación que en esta Parashá, donde se habla de llevar las Primicias con humildad, agradecimiento y alegría, se nos está marcando un camino hacia nuestra propia elección, ya no sólo de los Bikurim, sino de qué tipo de Vida queremos vivir. Y por eso se lee poco antes de Rosh Hashaná, cuando hacemos un balance y elegimos si ubicarnos o no en el lugar de la Bendición en el Monte Guerizim.

Hoy, a nueve días de Rosh Hashaná, tengo la sensación de que es tiempo de tomar una canastita y poner en ella: Humildad, Gratitud y Alegría. 

Tengo la sensación de que es ésa elección, la que nos acercará a una Vida de bendiciones. 

Quiera D´s y nosotros que así sea.